No podríamos hablar de la historia de Mollendo y aún de la provincia de Islay, sin reseñar una historia de amor que la protagoniza “LA CONGREGACIÓN DE LAS HIJAS DE LA CARIDAD DE SAN VICENTE DE PAÚL” con su llegada a nuestro puerto.

 

LLEGADA DE LAS HIJAS DE LA CARIDAD A MOLLENDO

De : Abdón Aranibar Pinto

No podríamos hablar de la historia de Mollendo y aún de la provincia de Islay, sin reseñar una historia de amor que la protagoniza “LA CONGREGACIÓN DE LAS HIJAS DE LA CARIDAD DE SAN VICENTE DE PAÚL” con su llegada a nuestro puerto hace más de 100 AÑOS compartiendo su caridad en los pobres.

El 6 de enero de 1871, entonces en el Perú presidente don José Balta y Barreda, quien en una comitiva oficial visita Mollendo y Arequipa para inaugurar el ferrocarril del sur, nuestro puerto fue elegido como el lugar más apropiado para desembarcar materiales e iniciar el trazado de la vía férrea.

A la par del avance del ferrocarril se suscitaron muchas epidemias y enfermedades lo que conmocionó a la ciudadanía, se crea la Beneficencia Pública y se inicia la construcción del hospital “Del Carmen”.

Los comienzos fueron difíciles, faltaba todo menos trabajo, había inexperiencia administrativa, necesidad de mayor asistencialismo. Los directivos de la beneficencia acertaron en contactar con la “Congregación De Hijas De La Caridad”.

Tres años de insistencia costo a la Beneficencia, por los muchos trámites que esto determinó la llegada de las Hermanas. Fue entonces que respondiendo al llamado del servicio arribaron a Mollendo el 14 de octubre de 1903 para regentar el hospital de Carmen, recibidas con algarabía y repique de campanas.

Llegaron Sor Juana Revilla, Superiora, las Hermanas Margarita Navarrete y María Rul y luego medio centenar de hermanas que constituyeron un factor valioso para la marcha del nosocomio, por su experiencia vocación de servicio y amor, que lo demostraron en el trato hacia los pacientes, cual fuera su condición económica y social de los mismos y a cualquier hora del día o de la noche, se ganaron la gratitud del pueblo de Mollendo.

Nunca escatimaron esfuerzos y continuaron su misión formando el grupo “Hijas de la Caridad”, que incentivaba el amor a la virgen María; paralelamente se preocuparon por la niñez y fundan la escuela “San Vicente de Paúl”  a cargo de Sor Luisa Darbeau; ante la necesidad del apoyo moral para las ancianitas crea la “Asociación Santa Luisa de Marillac” por gestiones de Sor Luisa Barreda Ocampo;  las necesidades aumentaron y las hermanas piden al gobierno central crear un colegio para señoritas que luego se llamaría Colegio Nacional de Señoritas “San Vicente de Paúl”, asimismo, en 1936 funda el Club católico “Niño Jesús de Praga” con un grupo de jóvenes que gustaban del deporte.

Fueron muchas las obras que las hijas De La Caridad realizaron en Mollendo, esfuerzo y sacrificio entrega y convicción que repercutió en toda la provincia, fue verdaderamente una bendición en medio de tanta dificultad.